Shy Cosmetics nació de la pasión y la visión de su fundadora. Al principio, mi clienta se acercó con una simple solicitud: diseñar etiquetas para el embalaje de sus productos. Sin embargo, al sumergirnos en el corazón de la marca, nos dimos cuenta de que había una historia mucho más profunda por contar. Lo que comenzó como un proyecto de diseño de etiquetas pronto se convirtió en una colaboración apasionante para desarrollar un branding completo que capturara la esencia de la marca.
Nos embarcamos en un viaje de exploración y creatividad para crear una identidad visual que reflejara la visión de la marca. Desarrollé un logo que capturaba la esencia de la marca: una mezcla de elegancia y naturalidad, con un toque de misterio y sofisticación.
Cada elemento del branding, desde la paleta de colores hasta la tipografía y los gráficos, fue cuidadosamente seleccionado para transmitir los valores y la personalidad de Shy Cosmetics. El resultado final es una identidad visual cohesiva y poderosa que eleva la marca y la posiciona como una fuerza innovadora en la industria de la belleza.